Menú móvil

El Notario - Cerrar Movil
Revista88

ENSXXI Nº 89
ENERO - FEBRERO 2020

Por: JOSÉ ARISTÓNICO GARCÍA SÁNCHEZ
Presidente de EL NOTARIO DEL SIGLO XXI


LOS LIBROS

El debate sobre la verdad histórica de la leyenda negra deriva en lucha política partidista

En una 2ª entrega, Fracasología, Roca Barea se reafirma en su tesis de responsabilizar a las élites españolas de haber interiorizado las falsedades de la leyenda y provocar la deriva de la conciencia nacional hacia el pesimismo

Cuando en su nº 72 y a escasas fechas de su aparición, esta revista destacó la originalidad y fuerza del libro de Roca Barea Imperiofobia y leyenda negra (Ed. Siruela, oct. 2016) como una obra ciertamente polarizada, apasionada y chispeante, pero que desmontaba con pruebas contundentes muchos de los bulos de la leyenda negra, no era fácilmente previsible su destino, ni el de convertirse en un éxito editorial irrefutable -ya más de 150.000 ejemplares- ni el de desatar al tiempo una polémica tan desabrida entre críticos y partidarios de la obra.

Mérito innegable de esta valiente profesora malagueña ha sido dar un aldabonazo para llamar la atención sobre la falsedad de gran parte de una leyenda denigrante que parece haber sentado plaza estable en el imaginario universal.

"Es mérito innegable de Barea haber dado un aldabonazo sobre la falsedad de gran parte de una leyenda denigrante que parece haber sentado plaza estable en el imaginario universal"

Positivo es por ejemplo que al calor de esta llamada hayan surgido nuevos trabajos y ensayos de líneas afines o paralelas. Y positivo es que Santiago M. Machado haya actualizado su discurso de ingreso en la Academia de Ciencias Morales y publicado un interesante y significativo ensayo Civilizar o exterminar a los bárbaros (Ed. Crítica, nov. 2019) en que, sin mencionar a Roca Barea, coincide con ella en rechazar esa especial virulencia que se suele atribuir a los colonizadores españoles frente a otros pueblos civilizadores, y aunque su ensayo se centra en el análisis desde el ángulo técnico-jurídico de las doctrinas y títulos de ocupación que ampararon las colonizaciones americanas, en especial las de España e Inglaterra, resalta claramente la superioridad del manto doctrinal elaborado por el dominico P. Vitoria y el franciscano Juan Ginés de Sepúlveda, frente a las doctrinas de John Locke y la proclama de requisa y concesión real de Jorge III en 1763 que derivó en la famosa sentencia del TS de Estados Unidos de 1823 que justificaban su política, no de integración como fue la española, sino de segregación y reclusión forzosa de los indios en reservas y su subsiguiente extinción, o más propiamente exterminio como sugiere el título del ensayo y confirman historiadores tan poco sospechosos de sectarismo como John H. Elliot.

"Santiago M. Machado resalta la superioridad del manto doctrinal elaborado por el Padre Vitoria y Juan Ginés de Sepúlveda, frente a las doctrinas anglosajonas que justificaban su política, no de integración como fue la española, sino de segregación y reclusión en reservas, y su subsiguiente exterminio"

También provocó rechazos el libro de Barea. Enseguida surgió una réplica visceral, Imperiofobia y el populismo nacional-católico (Ed. Lengua de Trapo, abril, 2019) del profesor Villacañas, un ataque frontal a Barea a la que califica de amateur desinhibida y a su libro que tacha de científicamente falso, imputándole además la consigna bastarda de intentar colar a los lectores a través de falsedades históricas doctrinas políticas insanas.
La polémica, a la que se había sumado el catedrático Carlos Martínez-Shaw, se fue enconando. Un artículo en El País el 20 de diciembre pormenoriza varias citas del libro tergiversadas e inexactas, Arturo P. Reverte, sin duda en repuesta a las duras acusaciones de Barea de estar colaborando en sus novelas a difundir tópicos hispanófobos, la acusó con acidez de caprichosa y de mezclar hechos irrefutables con turbios escamoteos etc.
Roca, que en una Tribuna el 29 de julio había advertido que lo que molestaba de su libro no era su contenido sino su éxito, como lo prueba que las censuras hubieran empezado a raíz de la celebración de los 100.000 ejemplares en la primavera de 2019, fue defendida desde El Mundo (twiteó que la elocuente paradoja de la compaña contra Elvira Roca es que viene a reforzar la tesis principal de su obra) y por una recogida de firmas suscrita por F. Sabater, Arcadi Espada, Boadella, incluso la Directora de la Real Academia de la Historia, Carmen Iglesias… hasta cien escritores y firmas conocidas.

"La polémica, en una disparatada deriva, se ha trasladado al terreno personal y a la arena política, como si la verdad histórica pudiera ser monopolizada -como de hecho se intenta con la bandera, la cultura o el progreso- por un solo sector"

La polémica, en una disparatada deriva, casi había abandonado el plano científico para trasladarse al terreno personal y a la arena política, como si la verdad histórica pudiera ser monopolizada -como de hecho se intenta con la bandera, la cultura o el progreso- por un solo sector. Y su acritud no ha hecho recular a la autora sino todo lo contrario, se ha crecido.
Roca ha insistido y hasta extremado sus tesis en una segunda parte de su obra, Fracasología, España y sus élites: de los afrancesados a nuestros días (Espasa, Ed. Planeta 2019), en la que con una exhibición de 32 páginas de bibliografía como respuesta, se ratifica en su tesis principal de responsabilizar a las élites españolas, a partir del siglo XVIII en que tuvo lugar la colonización de España por los Borbones, de haber interiorizado acríticamente, como prueba de progresía liberal, los tópicos de una leyenda creada con inquina por los enemigos del país que se fue convirtiendo en prejuicio-feliz porque prima facie gozaba de prestigio intelectual. Y bien es sabido lo que dijo Einstein, es más fácil romper el átomo que un prejuicio.

"La obra contiene una sistemática descalificación de las élites españolas desde el siglo XVIII por no ser capaces siquiera de escribir la historia de su patria"

Cierto es que la obra adquiere a veces sesgo de libelo en especial contra Francia, su historia vituperable, dice, está a la vista, plena de fracasos y derrotas, París es la ciudad que más desfiles militares de fuerzas de ocupación ha sufrido… etc., pero envidia a los franceses que a pesar de ello adoran sus harapos, se autoconvencen y tratan de convencernos de que lo ocurrido -aunque sean desastres- es lo mejor que podía ocurrir… Roca, desde luego, cuelga todos los males del fracaso nacional de la percha de la colonización que Luis XIV hizo de España convirtiéndola en una provincia acomplejada en el orbe de su influencia cultural desde la llegada de su nieto Felipe V.

"Roca insiste en imputar a las élites intelectuales las causas del que llama fracaso, anomalía, exotismo o pesimismo consecuencia de una leyenda tergiversada que sin embargo ha enraizado en la conciencia social induciéndonos al pesimismo"

Su nueva obra abunda en las tesis de Imperiofobia. Se explaya más en una sistemática descalificación de las élites españolas desde el siglo XVIII por no ser capaces siquiera de escribir la historia de su patria (de hecho hay un vergonzoso interregno de 250 años desde la historia del P. Mariana, que llega hasta los Reyes Católicos, y la historia de Modesto Lafuente de 1850, en el que solo nuestros enemigos, franceses e ingleses, hacían relatos, siempre sesgados, de nuestra historia. Relatos que las élites aceptaban acríticamente). Tampoco han sido capaces de argumentar, por ejemplo, con los desastres de la armada inglesa, la de la Contraarmada de Drake en 1589 o la derrota de aquella armada de Vernon de 195 navíos, la mayor conocida hasta el desembarco de Normandía, en Cartagena de Indias en 1741 por un Blas de Lezo disminuido, derrotas ambas que los ingleses apenas citan de pasada. O en el orden intelectual los avances de la Escuela de Salamanca del siglo XVI, inventora del calendario que hoy rige el planeta, creadora de las bases del Derecho de Gentes, del principio de soberanía popular -el rey recibe el poder soberano de Dios pero a través del pueblo lo que excluye el absolutismo e instaura la doctrina del bien común-. O en el orden científico los avances en análisis en pleno siglo XVI del fenómeno de la inflación y sus causas que analizó Azpilicueta en un Manual que tuvo 81 ediciones en 70 años y que desapareció de los tratados europeos al uso hasta que Schumpeter lo recuperó en 1953.

"Fracasología ha recibido un aplauso bastante generalizado sin alcanzar desde luego las cotas de Imperiofobia, hasta el momento su cota de difusión alcanza los 15.000 ejemplares"

Roca insiste en imputar a las élites intelectuales las causas del que llama fracaso, anomalía, exotismo o pesimismo consecuencia de una leyenda tergiversada que sin embargo ha enraizado en la conciencia social induciéndonos al pesimismo. Exculpa al pueblo llano que nunca se afrancesó, como dejó patente la plebe, por ejemplo ese hijo del pueblo llano, un cura liberal, un centauro, Muñoz Torrero, un protoconstituyente hoy olvidado, que Roca ensalza, y demostraron en Cádiz en 1812 los procuradores populares que, liberados de los Borbones, recuperaron la tradición española, restituyeron la soberanía a la nación quitándosela al rey y declararon legítima la guerra contra el francés porque así lo había decidido la nación, haya hecho el rey lo que haya hecho en Bayona.
Roca solo imputa a las élites, a Moratín, a Jovellanos, a Larra, a los llamados afrancesados, a la generación del 98 que alimentó y llevó al paroxismo el sentimiento del fracaso nacional y su humillación inconsciente ante la cultura francesa. Y, cuando ésta declinó, de repetir su entusiasmo con la cultura alemana, esa germanización idealizada, el supremacismo moral del norte que los intelectuales españoles asumieron como verdad revelada, de lo que es un síntoma infalible que de la obra de Max Weber La ética protestante y el espíritu del capitalismo y su discurso irracional del auri sacra fames se hicieran en España tantas ediciones como en Alemania, 14, lo que no ocurrió en ningún otro país del mundo (3 en Francia y 2 en Italia). Ese ensayo acentuó, dice Barea, el complejo de inferioridad moral y el supremacismo protestante. Y lo razona: el protestantismo nace para oponerse al catolicismo y la potencia hegemónica del momento, era la España católica.

"La sociedad ha dado un placet con laude a Barea, la tesis central de la obra, aparte imprecisiones, está fundada, es convincente y cumple su objetivo de dar un aldabonazo para abrir cuantos debates sean precisos para despejar sombras históricas y desterrar las visiones fatalistas o agoreras de la historia de España"

La nueva obra de Roca Barea ha merecido el Premio Espasa 2019 y ha recibido un aplauso bastante generalizado sin alcanzar desde luego las cotas de Imperiofobia, hasta el momento su cota de difusión alcanza los 15.000 ejemplares.
No es posible a los profanos valorar científicamente el rigor de todas las citas, episodios, datos y transcripciones que estos libros, y casi todos los libros, contienen. Ojala se pasaran por tamiz tan tupido como se ha hecho ahora, todos los libros y ensayos históricos que se editan. 
Pero desde luego está fuera de lugar el sesgo político con que se ha querido desautorizar el inapreciable trabajo de Roca Barea. La sociedad le ha dado un placet con laude. Y aunque haya errores en citas o datos, la tesis central de la obra, aparte matices y precisiones, está fundada, es convincente y cumple su objetivo de dar un aldabonazo para abrir cuantos debates sean precisos para despejar bulos errantes, sombras históricas y desterrar las visiones fatalistas, fatídicas o agoreras de la historia de España. De cualquier historia.

Música y cine: una simbiosis feliz

En esta 2ª parte de su obra Amorós describe, en un alarde de didáctica musical, las emociones de la conjunción artística de música e imagen en movimiento

No ha mucho, en el nº 79 de esta revista correspondiente a mayo de 2018 cantábamos albricias por la aparición de una extraordinaria obra de divulgación musical, La vuelta al mundo en 80 músicas, de un humanista plurigalardonado, literato insigne y catedrático de literatura, Andrés Amorós, en la que con un lenguaje llano y directo y en una exhibición didáctica asombrosa, trasladaba a claves transparentes y descifraba el misterio de las emociones que produce tanto la música clásica o científica, fruto de esos monstruos enfermos de lo sobrenatural según los llamó Nietzsche, como la popular, religiosa, militar u otra de cualquier laya que haya conmovido a la humanidad.

"Nos descubre la clave oculta, el secreto de cada ritmo y cada compás, también de la música contraria que por contraste acentúa la expresividad de la imagen"

Uno de los lemas de esa obra era ya Tócala de nuevo Sam, en guiño de complicidad con esa canción Play it again, Sam, que ha pasado a la mitología cinematográfica universal como símbolo de la sensibilidad de una época. Hoy ese lema lo ha convertido Amorós en el título de una nueva obra, Tócala otra vez, Sam (Fórcola Ediciones, 2019), circunscrita a la música de cine en la que el autor, en esa versión asombrosa de didáctica musical que practica, nos hace revivir las emociones que esa simbiosis artística de música y cine produce.
Amorós interpreta lúcidamente la oportunidad o el porqué del formato, del momento, del tipo de reproductor o del lenguaje que hace brotar cada melodía o cada modulación en la pantalla. Nos descubre la clave oculta, el secreto de cada ritmo y cada compás, también de la música contraria que por contraste acentúa la expresividad de la imagen. Y lo hace analizando en una primera parte, la obra de 10 directores geniales, de Ford y Eisenstein a Visconti y Fellini y su colaboración con míticos compositores como fueron Tiomkin, Young, Steiner, Morricone o Elmer Bernstein, entre otros. También se detiene en una segunda parte revisando 20 películas del Oeste, 20 westerns que han originado quizá las melodías más típicas e identitarias de los legendarios horizontes del oeste. Y concluye con una tercera parte que analiza 25 evocadoras canciones de amor que el cine hizo universales como mitos de nostalgias o añoranzas de época, por ejemplo Yo te diré o Amado mío.
Pero este libro que el autor dedica, según explica en el prólogo, no al académico o erudito de turno sino al lector medio, libro ligero y profundo a la vez, doctoral y ameno a un tiempo, no es una simple relación o catálogo de películas y melodías. Va más allá. Como ya avisa también en el prólogo y demuestra implícitamente en el texto, constituye un fundamentado ensayo sobre el resultado de la simbiosis artística de dos artes aparentemente ajenas entre sí, como son el sonido y la imagen en movimiento.

"Libro ligero y profundo a la vez, doctoral y ameno a un tiempo, no es una simple relación o catálogo de películas y melodías, constituye un fundamentado ensayo sobre el resultado de la simbiosis artística de dos artes aparentemente ajenas entre sí, como son el sonido y la imagen en movimiento"

Mucho se ha teorizado sobre esta conjunción. Incluso se le han dedicado tratados enteros. El catedrático de Cambridge Tim Blanning, por ejemplo, defensor de la tesis de la música como arte dominante y, a pesar de la realidad incuestionable de que la música podría vivir sin las imágenes, pero las imágenes no podrían vivir sin la música, concluye su obra básica El triunfo de la música (Acantilado 2011) reconociendo que la relación entre música e imagen en movimiento ha sido mutuamente beneficiosa. Juntas se potencian ambas. Otros en cambio, como Wagner, solo llevaban a la cúspide de lo sublime a su síntesis artística, el drama musical.
La verdad pocas veces es absoluta. Hay veces que en el cine se produce una mera yuxtaposición o acompañamiento servil de imagen a sonido o a la inversa. En escala superior podría decirse que hay ocasiones en que la música realza la expresividad del fotograma o en las que el fotograma recupera, actualiza o intensifica una melodía. Incluso, yendo más allá y aplicando la observación metafórica de Oscar Wilde y reconociendo al compositor un papel similar al que W. Benjamin atribuye al crítico, podría decirse que la partitura crea o cocrea una imagen que sin la música devendría estólida, lo que consigue por ejemplo la cítara de El tercer hombre capaz de crear ese clima inquietante de alusión y misterio de la Viena de la posguerra y que la imagen sola nunca daría, y especialmente ocurre con la música clásica que llega a desbordar al film cuando es utilizada para vigorizar la acción y lo hace de forma tan intensa que el sonido parece acaparar toda la emotividad en su insondable destino, vampirizando acción y pantalla, lo que ocurre por ejemplo cuando se utilizan como puntal La cabalgata de las Walkyrias o la Tocata y fuga en re nº 2 de Bach.

"Hay ocasiones en que la simbiosis entre imagen y música es tan perfecta que se sublima en un arte nuevo, una creación simbiótica conjunta que, como quería Wagner, incita a las emociones a alcanzar una conclusión nueva y superior"

Y también hay ocasiones en que la simbiosis entre imagen y música es tan perfecta que se sublima en un arte nuevo, una creación simbiótica conjunta que, como quería Wagner, incita a las emociones a alcanzar una conclusión nueva y superior, de lo que podrían servir de exponentes el Adagietto de la 5ª Sinfonía de Mahler con las imágenes de Muerte en Venecia o las andanzas de Barry Lyndon al ritmo del Trío nº 2 de Schubert.
Sobre todo esto y sobre mucho más reflexiona este libro delicioso. Leerlo no solo añade cultura y erudición. También hace revivir emociones latentes que cada film dejó en su día en el subconsciente y experimentar las nuevas sensaciones que su lectura despertará al ir desvelando perfiles ocultos y enigmas inadvertidos, ahora descifrados, del abismo de emociones ocultas que siempre intuimos detrás del sonido.

In Memoriam de un maestro

Un recuerdo duradero del que fue maestro de todos, y además un hombre íntegro y cabal

No podemos dejar de lado la reciente publicación del liber amicorum de José Mª Castán, fallecido hace escasos meses, que ha editado el mes pasado la editorial valenciana Tirant lo Blanch con el título Homenaje a José Mª Castán Vázquez y que contiene una sugerente colección de magníficas monografías, obra de eminentes juristas, que han volcado su saber con esmero y devoción, para ultimar trabajos señeros que supondrán un recuerdo duradero del que fue maestro de todos, y además un hombre íntegro y cabal.

BREXIT jurídico, 2ª edición

Analiza con rigor el alcance y las consecuencias del Brexit

También es de destacar la aparición de la 2ª edición de la magnífica obra colectiva, coordinada por los prestigiosos catedráticos KRAME, BALDOS y SCHMIDT-KESSEL, que analiza pormenorizadamente el alcance y las consecuencias del Brexit. La obra se titula BREXIT: Consecuencias en Derecho Privado y en Derecho de Economía. Consta de cinco secciones que encabezan estos titulares: Fundamentos, Consecuencias de orden general, Consecuencias en Derecho Privado y Derecho Económico, Consecuencias para Escocia e Irlanda del Norte”, las cuatro redactadas en alemán, y la quinta parte, en inglés, está referida a las particularidades de ordenamientos europeos.
La obra, de máxima actualidad, es concienzuda. A pesar de ello, o quizá a causa de su rigor, concluye lamentando las numerosas incógnitas que quedan por despejar.

Reinos de sangre y ambición

Su interés histórico por el rigor de personajes, tramas y escenarios le auguran otro éxito editorial

No hace mucho nos hacíamos eco de la publicación de una novela apoyada en la historia, Reinos de sangre, cuyo hilo argumental se desarrollaba en las cortes cristianas de León, Pamplona y Castilla durante la primera mitad del turbulento siglo XI, escrita por Oscar Eimil Trasancos, registrador de la propiedad. Hoy podemos congratularnos con la aparición de la segunda parte de esta saga desarrollada entre las traiciones e intrigas cortesanas durante la segunda mitad de ese mismo siglo que el autor ha investigado concienzudamente. Se titula Reinos de ambición y ya nos adentra en el califato cordobés, la escisión de Portugal y la expansión de Cluny por ejemplo. Su interés histórico por el rigor de personajes, tramas y escenarios, el léxico correcto y su sintaxis lineal le auguran otro éxito editorial.

El buen funcionamiento de esta página web depende de la instalación de cookies propias y de terceros con fines técnicos y de análisis de las visitas de la web.
En la web http://www.elnotario.es utilizamos solo las cookies indispensables y evaluamos los datos recabados de forma global para no invadir la privacidad de ningún usuario.
Para saber más puede acceder a toda la información ampliada en nuestra Política de Cookies.
POLÍTICA DE COOKIES Rechazar De acuerdo