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¿Profesiones extraterritoriales?

El Tribunal de las Comunidades Europeas, en una sentencia del pasado 10 de Diciembre dictaminó que a falta de armonización de las condiciones de acceso a una profesión, los Estados Miembros tienen derecho a definir los conocimientos y aptitudes necesarios para el ejercicio de dicha profesión y a exigir la presentación de un título que certifique que se poseen los conocimientos y cualificaciones exigidos. Pura lógica. 
Y si esta doctrina nace referida a los letrados que pretendan ejercer la abogacía en otros estados comunitarios y
respecto a algo menos sustantivo como es el periodo de formación práctica que en casi todos se exige para el ejercicio de esa profesión, ¿quién y sobre qué base podrá pretender ejercer la profesión notarial en nuestro país sin pasar un examen que confirme los mismos conocimientos y cualificaciones acreditados por los notarios en las actuales oposiciones? ¿Y quién y sobre qué base podrá pretender que accedan directamente a los registros los documentos extranjeros que no hayan pasado el filtro controlador de los profesionales que sí han acreditado esos conocimientos y por tanto han demostrado capacidad para conseguir que los documentos que publiquen los registros merezcan la confianza ciudadana?

¿Elección democrática?

Un medio nacional, el pasado 4 de Enero a propósito de la elección del nuevo Decano-Presidente de los registradores, titulaba "Nuevos presidentes y más choques", lo que no deja de ser una alegría torera, porque el nuevo ni siquiera ha tomado posesión del cargo y malamente puede haber chocado ya, máxime cuando en la propia nota el redactor dice que el electo apuesta por el cambio, lo que --aunque no aclara hacia dónde--  según el contexto habría de entenderse que apuesta por la paz, pues la nota aludía a choques continuos, y esa vía por la paz no coincide desde luego con los augurios que se cernían sobre la candidatura ganadora que era valorada como la mas fundamentalista, ni sobre la primera frase titular que se ha colgado en su haber, eso de que Los ciudadanos están firmando muchas hipotecas sin entender a lo que se comprometen (El economista, 22/1/10), frase que entraña un severo repaso a la función notarial.
Pero el derrote torero no paraba ahí. El redactor aprovechaba para mentar que en Enero pasado los 3.000 notarios
españoles fueron llamados a votar para elegir a su nuevo presidente, lo que en efecto es la aspiración de los notarios tan acreditada sistemáticamente y sin excepción en jornadas, congresos y debates como torpedeada por los integrantes de los grupúsculos representativos. ¿Llegará el día en que se superen esos cuerpos electorales reducidos, de tan desigual representatividad y peso, y  tan fáciles de reorientar, y los notarios vean colmada esta demanda, enraizada en el más puro estilo democrático, votando todos ellos a sus representantes, tras conocer  las personas de los candidatos y sus programas?
Una pena que lo que todos quieren se vea torpedeado por unos cuantos.

Engañar al guiri o ¿mero desmadre urbanístico?

Engañar al guiri, un deporte urbanístico. Así titulaba El Mundo una reveladora crónica el 7 de Enero pasado. Y siempre son los británicos los más afectados. Ocurrió en los años ochenta con el caso Mc Millan que denunció las faltas de garantías del sistema jurídico español cuando muchos quedaron defraudados en la costa levantina..., y luego se demostró que eran compradores en documentos privados, -es decir que habían bordeado el sistema de seguridad notarial/registral-y habían sido estafados por otros compatriotas suyos que actuaban de agentes a comisión y en quienes los perjudicados habían depositado en exclusiva y a ciegas  toda su confianza.
Ahora es más grave. En Almanzora -y desgraciadamente en más sitios- el fraude alcanza a 10.000 viviendas que son "
ilegales" y sin embargo tienen "licencia municipal", están construidas de hecho, y en ocasiones han recurrido al sistema de garantías de la justicia preventiva: hay escrituras y están inscritas en el Registro. Y Juvenal presume que notarios y registradores han cumplido estrictamente la ley. ¿Cómo es esto posible? ¿La responsabilidad es ahora política o es judicial?

Todo para el discapaz

Al parecer en una ciudad del sur las notarías están en una primera planta de un edificio antiguo que carece de accesibilidad para discapacitados que utilicen silla de ruedas (desgraciadamente el 90% de los del país), inconveniente que los notarios de esa plaza salvan tomándose la molestia "con agrado y sin poner pegas, según reconoce el medio" de bajar a la calle para otorgar allí con el discapacitado el documento correspondiente. ¿Qué más puede hacer el notario? Pues algunos piden más ... y Juvenal los apoya en esa pretensión de ayuda a los discapacitados. Pero, ¿han reflexionado todos sobre si hay más oficinas, públicas o privadas, además de las notarias, en las que el titular se moleste en bajar personalmente a la calle a atenderlos? 

Pero dentro de la lógica

Según el diario El Mundo de 11 de Enero pasado, el PP ha solicitado que los discapacitados puedan ejercer la profesión de notario, de lo que los notarios se sentirían muy honrados en aquellos casos en que nada impida o limite el ejercicio pleno y cabal de la profesión, paridad que por otro lado se ha observado siempre en el notariado.
Pero no es eso lo que denuncia el tabloide, sino que en la actualidad los discapacitados psíquicos, invidentes, sordos
o mudos, no puedan ejercer la profesión de notario, y el PP quiere acabar con esta situación.
Suponemos que esa habilitación sería extensiva en ciega igualdad a todas las profesiones, incluidas las que tengan los
promotores de esa idea. La verdad, cuando esto tuviere lugar, Juvenal no desea que los que esto proponen sean intervenidos quirúrgicamente por discapaces habilitados como cirujanos o cojan aviones pilotados o cuyos vuelos estén controlados por quienes, desgraciadamente, no puedan ejercer en plenitud las funciones de cada una de esas profesiones.

Incompatibilidades

Unión, Progreso y Democracia ha presentado en el Congreso una propuesta no de Ley para terminar con la anómala situación de incompatibilidad de hecho de los registradores de la propiedad que, simultáneamente, ejercen como liquidadores tributarios. Ni siquiera una autorización especial del Ministerio de la Presidencia puede avalar esta doble función, dice la propuesta, porque el importe de los honorarios que perciben supera con creces el límite legal (sueldo de Director General) y, especialmente  porque los contribuyentes quedan desprotegidos, por cuanto aplicar el  arancel sobre la mayor base que ellos mismos pueden fijar para liquidar impuestos supone una fragante contraposición de intereses. ¿Es esto cierto?

Transparencia

Nadie pone hoy en duda la necesidad de una mayor pulcritud informativa en la vida pública. Todos coinciden en que la claridad es atributo inescindible de una democracia real. En esta línea el Proyecto de Ley de Economía Sostenible obliga a las sociedades cotizadas a poner a disposición de sus accionistas información plena sobre las remuneraciones de consejeros y ejecutivos. 
Y si esto es en sociedades privadas, ¿hasta donde debería llegar el baremo de la transparencia en las Corporaciones
de Derecho Público?
Sin embargo no parece haber en éstas demasiada consciencia de este principio. Uno de los candidatos a presidir a los
registradores solicitaba en su programa que la retribución individualizada de los consejeros fuera publicada en abierto, como corresponde, por los registros mercantiles, pero nada decía de la publicidad de la contabilidad colegial o la de los registros, aunque en este gremio presumen de que los cargos son ingratos, exigentes y encima no retributivos. Más lejos se llega en el barrio de aquí, donde ni siquiera los que cotizan pueden saber, a pesar de la letra expresa de reglamentos y sentencias, si sus mandatarios siguen percibiendo compensaciones institucionales y sus cuantías.
Mal ejemplo que las Corporaciones (también los clubs, ONGs, partidos y demás) vayan rezagados en los capítulos de la
transparencia y la democracia.

Las escrituras, bien preciado

Cálculos autorizados estiman que en los bancos de España hay unas 13.000 cajas fuertes privadas. ¿Y saben ustedes lo que más se guarda en esas cajas de seguridad? Billetes de 500 euros y escrituras. Reconforta a Juvenal la alta estima en que los ciudadanos siguen atribuyendo a este documento, máximo exponente de seguridad contractual en derecho.

Saga de zahoríes

Resulta conmovedor leer en los medios a algunos miembros del cuerpo prediciendo el futuro de la crisis económica. Aún no hemos tocado fondo, decía hace poco en la prensa un decano norteño. 2010 será muy difícil a no ser que las entidades financieras abran la mano, decía otro. ¿Cómo lo saben y, si es así,  por qué no nos adelantaron  a todos en su día las fases de entrada y salida de la crisis?
Pero a todo hay quien da más. En la acera de enfrente aún hay quien dice que "el sistema registral español evitó que la
crisis nos alcanzase tan duramente como a otros.....", porfiando los asombrados lectores si esta afirmación se deberá más al desparpajo o a la candidez. Pero también hay quien se ha dejado influir por esa fama de augures que se propaga y así un registrador de Murcia exige en su calificación, bajo pena de sanción denegatoria, que el notario aclare en la escritura cómo y con qué medio de pago se van a pagar también las cantidades aplazadas en una compraventa. Como si muchos lo supieran ....

Progreso

Se encomia desde AIRE, web de la Asociación Independiente de Registradores, el proyecto de ley que propone reformar la regulación de los créditos refaccionarios introduciendo la forma electrónica en lugar de la escritura pública. De progresista califica la plataforma AIRE esta medida, que reconoce el avance y la garantía que significa la posibilidad de utilización de la firma electrónica y la potenciación del documento privado como medio válido de acceso al registro. El ahorro de costes, añade,  es significativo. 
También debe valorarse probablemente como progresista que las adjudicaciones de vivienda familiar en caso de
divorcio se hagan en documento privado-judicial que no tributa por AJD como las escrituras notariales, como aconseja un tribuno registral fijo, y probablemente también se estimen progresistas las manipulaciones en los plazos de constitución de sociedades que otro tribuno registral, éste accidental, hacía poco ha con el único objeto de encubrir una verdad inconcusa: que las sociedades se pueden constituir en cualquier notaria en menos de veinticuatro horas, copia incluida, y la duración de los trámites registrales no bajan de siete días. El que lo dude que haga la prueba.
Todos estamos con el progreso, aunque no esté tan claro qué debe tenerse por tal. Juvenal propone un experimento con
base empírica: imitemos a los países más avanzados del mundo en convivencia y bienestar, y copiemos sus sistemas, incluso los registrales, probablemente inferiores a éste, tan autoensalzado, valorado y admirado (incluso Obama se interesó por él, se dijo) pero que nunca ha sido copiado íntegramente y solo despierta curiosidad o interés en países del tercer mundo o en vías de desarrollo.

Litigios sin litigante

Un Tribunal Superior de Justicia ha comenzado a exigir poder notarial --o comparecencia personal ante el Secretario Judicial--, de los litigantes extranjeros que quieran interponer demandas o recursos. Parece ser que se han dado casos de pleitos sin litigante, recursos en vacío, reclamaciones sin actor y expedientes sin causa, es decir gratuitos.
Habrá que solventar situación tan pintoresca, pero Juvenal sugiere que no se erosione el principio de igualdad ante la
ley ni el derecho a la tutela judicial efectiva de los derechos de cualquier ciudadano.
                        
Bienvenida

Juvenal da una bienvenida sincera al nuevo Decano-Presidente del Colegio de Registradores, que, además de estar casado con una notaria, accede al cargo precedido de una justa fama de bonhomía y talante integrador, liberal y progresista, virtudes que esperamos le acompañen durante su mandato en la llevanza de los intereses de  la corporación que preside, deseándole que consiga un encaje pacifico y eficiente del quehacer registral entre el de todos los demás operadores jurídicos, y una versión racional y socialmente útil de la función registral, tan valiosa y necesaria en los parámetros actuales como lo fue en los que le dieron nacimiento hace dos siglos.

Crisis y pluriempleo

Desde la costa cántabra remiten a Juvenal esta fotografía exponente del variado pluriempleo que se presagia para los notarios si la testaruda crisis que azota el panorama económico se hace persistente.
 

 

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